Hola amig@s!

Hace unos días un paciente me escribió este escrito tan bonito, que me gustaría compartir con todos vosotros.

Se despoja de sus exigencias y falsas necesidades y se da cuenta de que vale porque es persona humana y por Amar, no por lo que tiene.

Espero que os guste!

“HE DECIDIDO”

“He decidido ser feliz independientemente de cada acontecer sin importar el color que traiga cada amanecer.

Me ocuparé de aquello que está en mis manos, lo demás, dejaré que su momento llegue y ya veré si me puedo ocupar.

El dinero ya no será más quien me controle. Yo lo dejaré libre para que pueda cumplir su función ir y venir con libertad. Igual seré feliz.

Mis posesiones no tengo ninguna, solo poseo el momento y voy a disfrutarlo.

La casa y la finca que llevan mi nombre no serán mi preocupación, sino un vehículo para descansar y dónde obtener algunas ganancias, pero si no viera mi cafetal dar fruto, igual seré feliz sabiendo que lo planté para que otros se beneficiaran de él.

No hay preocupación en mí, en qué será mañana de estos dos vehículos, cualquier uso que le den después de haber yo partido no es asunto mío. El tan solo hecho que también puede servir a otros me hará feliz.

Pero si mañana se acaba el universo y quedara solo yo bajo un inmenso árbol, lo abrazaré y aunque seres muy diferentes el uno del otro, comprenderé su esencia y no le exigiré que comprenda la mía.

Y sí, mi viaje es solo mi viaje, mío propio. No voy a intentar que nadie lo entienda pero yo si me esforzaré en entender que también los que caminan a mi lado viajan en su propia dirección. No voy a intentar suponer que deberían tener conocimiento de mi ruta personal.

Ya no hay tiempo para regresar a Cuba. Quizás sea mañana o quizás no sea nunca pero igual seré feliz porque la felicidad no está fuera, está en el coco.

Somos un ciclo biológico. Es natural vivir como morir incluso puede ser también la muerte emocionante y me asalta la curiosidad de la vida que puede haber detrás.

¿Y Dios? Finalmente le he desatado las manos para que me abrace y dejarme amar y lo percibo contento sonriente de que yo haya entendido que estoy aquí porque me ama y lo siento cerca y puedo abrazarlo desde la persona humana que soy. Fui creado con el solo propósito de Amar, lo demás fue añadido en el camino por circunstancias y culturas.

Me quedo aquí, claro, limpio, como recién bañado y despojado de cargas inútiles, de ansiedades innecesarias que solo interrumpen el ciclo de mi creación personal, el amor.

Cuándo haya tormentas me bajaré de la barca porque no se vale hundirse.

Siento mis pies descalzos, mi mente en calma, mi corazón tranquilo y soy feliz.

Me siento despojado de todo, incluso despojado de mí mismo, de aquellos pensamientos irracionales, de posesión, de protección y me quedo así desnudo y revestido a la vez de lo ligero y me doy un beso en el alma por este maravilloso momento, no tengo nada y lo tengo absolutamente todo.

Gracias Mireia por ayudarme a levantar el ancla para que mi barca siga su maravilloso viaje.”

Mireia  Casas

Psicóloga Colaboradora del Centro de Terapia de Rafael Santandreu