Más no siempre es mejor.

<<Más no siempre es mejor>>; lo correcto es la medida justa.
La naturaleza funciona con la búsqueda de un equilibrio constante. Por ejemplo, existe un número óptimo de hormigas para determinado terreno; incrementar o disminuir artificialmente ese número puede desencadenar un desastre ecológico. Necesitamos ingerir cierta cantidad de agua diaria y por encima o por debajo de esos niveles no estamos hidratándonos bien. Todo tiene su límite y <<la comodidad>> no se sustrae a ese principio: un poco de comodidad es buena, pero demasiada, es mala para el coco.
Fuente: twitter.com

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

  • Libros recomendados

  • Artículos publicados por mes